Vuelta a la mísera realidad

Después de un largo y sabático mes de agosto donde no ha habido nada que me haya hecho cambiar (en todos los sentidos) mi ruín y triste existencia, vuelve el mes de septiembre... tan proposicionado y odiado al mismo tiempo... como siempre.

Llega el momento de desempolvar todo aquello que dejé tirado y de mala manera un mes atrás... lo que por entonces suponía un alivio, ahora es una losa que cae encima y que voy a tener que aguantarla, o por lo menos acostumbrarme a ella, hasta las próximas "vacaciones" que vuelva a "disfrutar".

Y seguramente la vuelta a lo de siempre sea así, porque apenas me ha ocurrido nada. Vuelvo de mi paraíso con la maleta vacía de ilusiones y llena de insípidas sensaciones que me dejó un agosto tan largo como poco caluroso.

Pasados esos 30 y pico días largos... no sería capaz de responder ni de justificar el porqué de mi ausencia, de mi "viaje"... Todos los motivos que pensaba tener en aquel momento que decidí olvidar DesdeCero... por un tiempo, se han esfumado y han dejado de tener sentido.

La vuelta a la realidad me ha enseñado que los sueños, como tales, mejor dejarlos donde están. No renuncio a ellos pero siempre lo haré con los ojos cerrados, sin mucha luz... y con la consciencia mínima para que al día siguiente apenas recuerde todo lo soñado.

Prefiero vivir en esta realidad, que alguna vez me dará alguna alegría, que no esperar nada de los sueños... porque los sueños, sueños son...